Madrid, 9 de diciembre de 2015. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha iniciado acciones judiciales contra los principales fabricantes de teléfonos móviles por la publicidad engañosa que estos realizan sobre la capacidad de la memoria de los terminales. El objetivo de esta iniciativa es conseguir que los fabricantes informen sobre la capacidad real de memoria de los teléfonos. Además OCU pide que para los teléfonos ya vendidos se permita el borrado de aplicaciones o en caso de que no sea posible que el consumidor obtenga una compensación por los gigas de memoria perdidos.
OCU señala que la capacidad de la memoria es una de las características principales de un teléfono móvil, y hace que un consumidor se decante por un modelo u otro distinto. OCU ha detectado mediante pruebas de laboratorio que la capacidad de almacenamiento interno disponible dista mucho de la anunciada. Los terminales llevan aplicaciones no solicitadas por los consumidores, que no pueden ser suprimidas y que a veces se actualizan restando espacio al dispositivo. Es más, en muchos casos, algunas de estas aplicaciones que reducen el espacio disponible por el que el consumidor ha pagado, abonan una contraprestación a los fabricantes del teléfono.
Las pruebas realizadas por OCU ponen de manifiesto que el porcentaje de memoria real sobre la memoria publicitada varía de unos fabricantes a otros y depende de la capacidad de almacenamiento del teléfono. En el caso de los teléfonos más pequeños, los de 4 Gigas o menos y los de entre 4 y 8 Gigas, el porcentaje de pérdida de memoria puede llegar al 78% en algunos casos, lo que hace prácticamente inservible el teléfono en muy poco tiempo de uso. Y en el de los teléfonos de 8GB, se llega hasta el 70%.
OCU considera que esta publicidad engañosa causa un serio perjuicio al consumidor. Por ello ha emplazado judicialmente a la mayoría de fabricantes de móviles para que rectifiquen su publicidad instándoles a una conciliación judicial. En su escrito presentado al Juzgado OCU pretende conseguir que los fabricantes modifiquen su publicidad de forma que se informe al consumidor de la capacidad real efectiva de la memoria.
OCU requiere también a los fabricantes para que permitan la desinstalación de las aplicaciones que vienen instaladas de serie, para que el usuario pueda si lo desea ampliar la capacidad del teléfono. Para aquellos casos en los que esta operación no sea posible OCU pide una compensación para los usuarios por los gigas perdidos.
OCU ha puesto en marcha la campaña http://www.ocu.org/movilizate/no-tocar-gigas
para pedir el apoyo de los consumidores a esta acción judicial. En su página web, ha desarrollado una calculadora que permite a todos los consumidores comprobar la capacidad real de su teléfono móvil y sumarse a la iniciativa de OCU.
OCU ya denunció esta práctica ante las autoridades de consumo y ante la continuidad de la publicidad que considera engañosa se ha visto obligada a iniciar esta acción judicial. Durante el procedimiento OCU piensa aportar los datos suministrados por los usuarios, así como pruebas de carácter pericial con el objetivo de obtener una justa compensación para los consumidores afectados por la publicidad engañosa por parte de los fabricantes de teléfonos móviles.
En un futuro cercano OCU no descarta extender las acciones judiciales emprendidas a otros fabricantes o a otros dispositivos como pueden ser ordenadores o tabletas.
Para más información (medios de comunicación): Eva Jiménez Tfno.: 91 722 60 61 - ejimenez@ocu.org www.ocu.org
Fuente: http://www.ocu.org/organizacion/prensa/notas-de-prensa/2015/campanagigas091215